Todos los padres quieren que sus hijos se familiaricen con la técnica, pero son conscientes de los peligros de los juegos y de internet.
Por ello, lo mejor será usar el Control parental de Windows Vista, que sólo tarda un momento en configurarse.Para ello, se elige Inicio, Panel de control, Cuentas de usuario y protección infantil, Configurar el Control parental para todos los usuarios. Habrá que crear una cuenta nueva para cada niño, y luego se entrará en ella para configurar los controles. Si se desea limitar el tiempo que pasan los hijos con el PC, hay que hacer clic en Límites de tiempo y aparecerá un gráfico dividido en días y horas. Cuando el niño se acerque al final de su tiempo, en la pantalla irán apareciendo avisos que le informarán de ello, y al final se visualizará la ventana de inicio de sesión. Sus tareas abiertas se mantendrán en segundo plano hasta la próxima vez que use el PC. También es posible autorizar o denegar el acceso a páginas web. Se pueden bloquear páginas que preocupen especialmente e impedir que el hijo descargue archivos. Con los juegos ocurre lo mismo, pues el apartado dedicado a ellos permite establecer clasificaciones en función de su idoneidad y vetar títulos. Si se activa el Informe de actividades, se obtendrá resúmenes que detallarán todas las acciones que los niños han hecho con el ordenador, lo que ayudará a su vez a ir optimizando la configuración. Si juegan demasiado, se puede vetar el acceso a los juegos, y si sólo han estado haciendo los deberes, se puede asignarles tiempo adicional de diversión.
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